Luego de más de un año, vuelvo a retomar este medio para comunicarme con ustedes.
Durante este tiempo he adquirido experiencia sobre discapacidad, teórica y práctica.
Desde mi modesto punto de vista, el avance sobre discapacidad ha sido muy lento.
El conocimiento de la discapacidad es tan informal, que sólo nos sirve de propaganda, pero de beneficio, nada.
He podido comprobar que muchas autoridades que trabajan el tema de discapacidad, en realidad, no lo conocen. Ni siquiera nuestras autoridades gremiales tienen un conocimiento razonable de la discapacidad.
Pido la contribución de las Universidades en el aporte científico y seriedad que necesita este tema.

martes, 15 de noviembre de 2011

UNA PROPUESTA DIFERENTE Y A LA VEZ MUY SIMILAR

Desde la época de Alberto Fujimori ( Diciembre de 1998) hasta la era Alan García (Julio de 2009) se han venido dando leyes de la Persona con Discapacidad y la ley de Infracciones por incumplimiento de esta a la par de sus respectivos reglamentos. Todos ellos han tenido algo en común, y es que, realmente, ninguna ha contribuido en beneficio de para quien fue creada, la Persona con Discapacidad, sino todo lo contrario, al estar separadas las obligaciones del resto de las personas fue más fácil incumplir estas sin ir contra, por ejemplo, la Ley Laboral Peruana la Ley de Educación Peruana, etc. Y generarse un problema mayor.
Esta Ley y sus adicionales, solo ha servido para discriminarnos, para tratarnos como si fuésemos seres diferentes a los demás (sino para que emitir una ley especial para lo mismo).
Por ejemplo, En el artículo 1, establece su finalidad y a la vez indica que esta se encuentra en el art. 7 de la Constitución. Lo mismo ocurre en el art. 3.
Es cierto que nosotros necesitamos ciertos beneficios o variantes, pero no es necesario, y yo más bien diría discriminante, generar una especie de Constitución especial para nosotros, las PCD. He escuchado a una Doctora prominente decir que a la Ley de Discapacidad le falta incluir los Deberes de la PCD porque solo se encuentran incluidos sus derechos. Como ven ella ya nos está considerando diferentes pues ella cree que esta Ley es una “Constitución de la PCD”.
Debemos asumir parte de la responsabilidad de estas consecuencias por haber permitido que nuestros problemas sean resueltos con leyes con nombre propio. Les preguntaré: ¿el problema de la mujer en el Perú se trato con una ley específica y con nombre propio como ha sido para nosotros?. Qué les parecería, por ejemplo emitir una “Ley para la raza negra”, para eliminar su discriminación. Sería un absurdo. Es como discriminar para evitar la discriminación.
He escuchado comentarios de personas importantes que dicen que esto es “Discriminación Positiva”. Señores, no existe tal discriminación pues también genera una reacción negativa en la sociedad. Además, estamos olvidando el motivo real de nuestro reclamo. De una vez por todas hay que incluir el término de “Diversidad Humana” en la Constitución del Perú (Art. 3º sección d, de la Convención, que a la letra dice: “El respeto por la diferencia y la aceptación de las personas con discapacidad como parte de la diversidad y la condición humanas”)
El 30 de Diciembre de 2007, Alan García Pérez, a la sazón Presidente de la República del Perú, mediante Decreto Supremo 073-2007-RE, el 30 de Diciembre de 2007 ratifica la “Convención sobre los Derechos de la Persona con Discapacidad”. Me gustaría recordar lo que dice el Artº2 respecto de la definición de “Discriminación por motivos de Discapacidad”.
“Se entenderá cualquier distinción, exclusión o restricción por motivos de discapacidad que tenga el propósito o el efecto de obstaculizar o dejar sin reconocimiento, goce o ejercicio, en igualdad de condiciones, de todos los derechos humanos y libertades fundamentales, en los ámbitos político, económico, social, cultural, civil o de otro tipo. Incluye todas las formas de discriminación, entre ellas, la denegación de ajustes razonables”
Así pues, nos encontramos, que a partir del 30 de Diciembre de 2007, nuestro gobierno viene incumpliendo lo firmado en la Convención y reafirmado mediante Decreto Supremo.
Han hecho una distinción entre trabajo, salud, educación, etc., de las PCD y los demás; han obstaculizado o dejado sin reconocimiento al no haberse cumplido la ley; además venimos sufriendo otras formas de discriminación (los ajustes razonables).
En la Convención no existe acápite alguno donde diga que tiene que existir una Ley específica para las PCD; sólo dice que en nuestras leyes se debe contemplar todo lo establecido y aceptado al firmar la Convención.
Sería mucho más conveniente que nuestros problemas de educación se contemplen dentro de la Ley General de Educación, así como nuestros problemas laborales se contemplen en la Ley General de Trabajo, etc. Al no cumplirse alguno de nuestros derechos se estaría incumpliendo la Ley General respectiva que tendría mucho más fuerza que una Ley de Discapacidad. ¿Y saben por qué?. Porque, además de todo lo dicho siguen asociando la discapacidad a asistencialismo (gasto del Erario Nacional). Una de las ventajas sería que es más expeditivo hacer agregados a una ley que crear una nueva.
Además, lo que hace que una Ley se cumpla es la voluntad política. Ya hemos tenido pomposas Leyes y Comisiones con el resultado que ustedes conocen.
Sólo se necesitaría una Ley específica para el CONADIS y a este se le debe encargar la emisión de un Compendio de Leyes de Discapacidad, entre otras cosas.
En resumen, mi propuesta (que sé va a originar muchas controversias) es la siguiente:
1. Todas las propuestas de mejoras o derechos especiales para nosotros deben ser incorporadas en las leyes respectivas, inclusive las de accesibilidad que serán incorporadas en el Reglamento de Edificaciones.
2. Ley de Conadis, quien será la encargada de hacer un Compendio de las Leyes que favorezcan a la PCD.
3. Solicitud al Congreso de la incorporación en la Constitución del término “Diversidad Humana”
Con ello obtendremos que nuestros derechos sean los derechos de todos y evitaríamos caer en algún tipo de discriminación y de presunciones.
Evidentemente aquí, también se requiere de “Voluntad política”, sobre todo para incorporar el concepto de Diversidad Humana, que será lo único que romperá las diferencias y discriminaciones entre los seres humanos.