EL EMPLEO Y LA INVISIBILIDAD

Sabemos que el problema de el Empleo es uno de los condicionantes importantes que impiden la inclusión social (o a la sociedad, como lo sugiere Jorge Balbín) de las personas con discapacidad, pero, también, hay un problema grave que es el de la invisibilidad.
Nunca nos han identificado en los censos, estadísticas y encuestas, obteniendo resultados menos desagradables, que seguramente les tranquiliza sus conciencias pero no la realidad.
Para muestra, un botón. La última encuesta sobre empleo en el Perú, realizada por la Pontificia Universidad Católica del Perú y divulgada por los medios de comunicación el 1º de mayo del 2010 hace referencia lo siguiente: Sobre un total de Población Económicamente Activa (PEA) de 4’779,100 personas, considera que actualmente se encuentran ocupadas 4’340,500 y desocupadas 438,600. Así mismo considera que 1’896,100 no buscan trabajo (me imagino porque no lo necesitan o no pueden realizarlo).
Lo curioso resulta cuando vemos informaciones que dicen lo siguiente: Existe en el Perú 674,981 personas con discapacidad sin trabajo. Esto fue publicado en su estudio: Demanda Laboral de Trabajadores con Discapacidad en las empresas del Perú, editado por CONADIS-JICA, 2009, Cuadro Nº 2, página 37. Si esta información es cierta,¿Dónde se han incluido a los 236,381 personas con discapacidad restantes?¿Y no existen personas sin discapacidad sin trabajo?.Lo más probable, es que para “variar”, nos hayan considerado como PERSONAS INACTIVAS. Como “somos” personas inactivas no ejercemos presión al coeficiente de desocupación y el Gobierno se mantiene tranquilo y las personas que leen sólo estadísticas no se escandalizan.
Esta es la ventaja, para ellos, de mantenernos en la invisibilidad, mientras nosotros seguimos soportando el flagelo de la desocupación y la exclusión de la Sociedad.
Señores del Gobierno, no crean que no entendemos la realidad, más aún, nos damos cuenta de su incapacidad para fomentar la creación de empresas. Siempre dicen que no son responsables de que no haya trabajo, esa es una verdad a medias, pues sí son responsables de no generar las condiciones favorables para la aparición y supervivencia de estas.
No negamos la existencia de la gran y mediana empresa, pero es importante la pequeña quien es la que contrata mayor cantidad de mano de obra.